lunes, 15 de febrero de 2016

El Mago de la Serpiente

El Mago de la Serpiente



Se oye hablar
de un misterioso hombre,
delgado y con tocado
muy bien arreglado,
que toca sentado
frente a un cesto repleto,
de cientos de mantos espesos.
Dicen que oculta un secreto
muy bien guardado,
tras su flauta travesera de color dorado:
comienza el soniquete, como salido de oriente,
que hace vibrar poco a poco,
y salir del cesto,
a una enorme serpiente.
Yo digo que hace magia
y mamá, que afila cuchillos.
Mago-de-la-serpiente

Hasta no poder más

Hasta no poder más

Felipe y Carola
se querían…,
hasta no poder más.
Corrían,
saltaban,
y jugaban a deletrear.
Hacían figuras
de arcilla, de arena…
de papel y tijera.
Alternaban pares y nones
tras sus riñones.
Escribían poemas de amor,
y leían cuentos de sal
y mucho pimiento.
La mamá de Felipe
decía, que los niños
no saben de amar,
pero Felipe y Carola
se querían…
hasta no poder más.

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El Ermitaño

El Ermitaño

el-ermitano 


Hombre serio y muy callado
o cangrejo colorado,
puede ser el ermitaño.
En busca de concha vacía,
cuatro antenas y dos pinzas,
el cangrejo ermitaño va.
En busca de paz en vida,
con el mundo a la deriva,
camina el eremita humano,
de espaldas a la ciudad.
Hombre serio y muy callado
o cangrejo colorado,
puede ser el ermitaño…


Poema infantil: El ermitaño


El Payaso Sinsón


El Payaso Sinsón


El payaso Sinsón
sonrisa no tenía
en su rostro bicolor.
Todas las tardes
los padres
pasaban de largo,
los niños reían buen rato,
y los perros
sacudían el rabo
ante el payaso Sinsón.
Pero Sinsón no comprendía
por qué nadie quería
ser parte de su función.
Pasábase las horas, Sinsón,
dándole vueltas al coco
y frotándose la nariz un poco,
buscando una solución.
Primero tocaba el violín
¡güin, güin, güin!
Después, tocaba el tambor
¡porrón, porrón, porrón!
Pero nada de nada
le funcionaba
al pobre Sinsón.
Y así, cada tarde,
niños y padres paseaban
ante un payaso de cartón.

Bailaba la niña alegre

 

Bailaba la niña alegre


Bailaba la niña alegre
en una noche estrellada.
Movíase, al son del aire,
bajo la luna de plata.
¡Cómo bailaba la niña!
¡Cómo la niña bailaba!
Con ojos como dos faros
y finas pestañas bordadas.
Con el corazón muy blanco
y mariposas en el alma.
Danzaba la alegre niña
bajo la noche estrellada
Cómo bailaba la niña,
cómo la niña bailaba.

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Migas de risa

Migas de risa


Poema infantil: Migas de Risa

Érase que se era
la historia de Elisa,
la pastelera.
Amasaba alegría
Elisa,
de trozo en trozo,
con montañas de harina,
huevo…
¡y migas llenas de risa!
Milhoja de salsa y fresa
para Señora Tristeza.
Bizcocho de risa y coco
para Don Paco
¡y poco!
[¡Que de la risa
se cae el moco!]
Érase que se era
en una asombrosa aldea,
la historia de Elisa,
la pastelera.
cocinera